Alrededor de 200 alumnos de nuestra comunidad siguen con mucho ánimo rindiendo un nueva jornada con ejercicios inesperados. Seguimos firmes entregándole a la comunidad una experiencia memorable y con ese ingrediente agregado del desafío mundial en el que nos encontramos.

Revisa las fotos del Open 23.2
Este viernes vivimos la segunda jornada del Open 23.2. Esta vez el WOD se veía divertido aunque bien agotador. Aparecieron ejercicios como el Shuttle Run, los Burpees-Pull Ups y el querido Thruster. Una secuencia inédita que, el día anterior, al ser anunciado el WOD, nos dejó algo sorprendidos en la comunidad. Y claro, entendemos esa constante búsqueda de CrossFit por descolocarnos e ir en busca de nuevos estímulos.
La jornada nos dejó muy sorprendidos ya que muchos que habían participado en Scaled la fecha anterior esta vez se animaron a ir por RX ya que los ejercicios, más allá del condicionamiento de cada uno, eran abordables para una buena parte de los participantes.

Un entrenamiento que también sentimos buscó, equiparar la cancha entre los más experimentados y los que recién se integran a los boxes, ya que se utilizaron ejercicios básicos para buena parte de la comunidad (Shuttle Runs, Burpees). Se requería más bien de fuerza mental y un constante estado de flujo, enfocado en la respiración, al menos en la primera parte, porque ya vendría la sorpresa de la jornada.
La segunda parte el desafío era imponente. Se trataba de buscar un RM (repetición máxima) en Thruster. Esta parte fue bien llamativa ya que se veía el esfuerzo máximo de cada participante y la emoción por lograr ese movimiento completo y que fuera válido hacía que todos aplaudieran y se abrazaran.
Muchos también lograron una nueva marca de RM, es decir, se atrevieron a ir en busca de un peso nunca antes levantado, cosas que se dan pocas veces pero que un ambiente propicio, en un contexto de fiesta deportiva, en que todos estamos motivados, que sufrimos en conjunto y nos esforzamos, la energía se vuelve contagiosa y hace que uno saque más fuerzas de las que cree tener. De esta forma nos arriesgamos un poco y obvio, nos terminamos sorprendiendo de nuestro potencial.
Ahora nos espera la jornada de cierre que esperamos nuevamente sea muy sorprendente y podamos disfrutar de un entrenamiento en comunidad que nos desafíe para disfrutar de lo que somos realmente capaces y esperamos gozar de ese ambiente motivador que hace que vayamos por más. Quedan días para preparar la última batalla y nosotros ya estamos con la mejor actitud para enfrentarla.